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Me llegó un mensaje del Señor que decía: Hijo de hombre, enfréntate a los montes de Israel y profetiza contra ellos.
Diles: ¡Montes de Israel, escuchen el mensaje del Señor Dios! Esto es lo que dice el Señor Dios a las montañas y a las colinas, a los desfiladeros y a los valles: Voy a atacarlos y a destruir sus lugares altos. Sus altares paganos serán derribados, y sus altares de incienso serán hechos pedazos. Mataré a sus adoradores de ídolos delante de ellos. Pondré los cadáveres de ustedes, israelitas, frente a sus ídolos y esparciré sus huesos alrededor de sus altares.
“En todos los lugares donde vivan, las ciudades se convertirán en escombros y los lugares altos serán derribados. Sus altares serán demolidos y profanados. Sus ídolos serán destrozados y destruidos por completo. Sus altares de incienso serán derribados, y todo lo que hiciste será arruinado. La gente será asesinada en todo el país. Entonces sabrán que yo soy el Señor.
“Sin embargo, dejaré que algunos de ustedes sobrevivan y los dispersaré entre las otras naciones.
“Cuando hallan llegado allí como prisioneros en esa naciones, entonces los sobrevivientes se acordarán de . Se darán cuenta de la tristeza que me causaron por su adulterio espiritual al abandonarme con sus ojos llenos de lujuria mientras adoraban a sus ídolos. Se odiarán a mismos por las cosas malas que hicieron, por todos sus repugnantes pecados. 10 Entonces sabrán que yo soy el Señor, y que no estaba fingiendo cuando les advertí que les iba a caer este desastre.
11 Esto es lo que dice el Señor Dios: Golpéense con las manos, pataleen y griten: ‘¡Oh, no!’ Hazlo por toda la terrible maldad del pueblo de Israel. Van a morir por la espada, el hambre y la enfermedad. 12 Los que vivan lejos morirán de enfermedad, los que estén cerca serán asesinados por la espada, y los que queden morirán de hambre. Así expresaré mi ira contra ellos.
13 Entonces sabrán que yo soy el Señor cuando los adoradores de ídolos yazcan muertos entre sus ídolos y en los altares en la cima de cada colina y montaña, y bajo cada árbol verde y gran roble. Estos eran los santuarios paganos donde ofrecían incienso aromático a todos sus ídolos. 14 Voy a levantar mi mano para castigarlos. En todos los lugares donde viven convertiré su país en un páramo, desde el desierto en el sur hasta Diblat en el norte.* Entonces sabrán que yo soy el Señor”.
* 6:14 “En el sur... en el norte”: añadido para mayor claridad.